domingo, 2 de junio de 2013

Jean Ryan - Otra canción desesperadas.

La luna es el sol de mi vida,
donde acaricio las mañanas,
llenas de luces,
cuando las amapolas,
de le dan color el crepúsculo del alba.

Déjame decirte que no estarás,
tan solitaria cuando te acuerdes de mi.
Acaricio tu sueños con los dedos,
y el vértigo de tus curvas,
me dan miedo.

Como pasaremos el atardecer,
escuchando a Pink Floyd,
y fumando, los dos, juntos,
sin separar nuestras carnes,
para que nadie, se pueda,
interponer a nuestras locuras,

El mar esta revuelto,
lo veo desde mi ventana,
como el sol se pierde,
en este horizonte,
donde la vida,
es mas pasajera,
aunque corta,
con dudas y inquietudes,
del saber que nos espera.

Pero en este día mi cuerpo,
queda desnudo,
a la naturaleza,
aunque me llamen el loco,
donde se cruzan,
las miradas,
y el fuego calienta,
nuestras pupilas,
y se nos envenenan las médulas.

No fue tan difícil este adiós,
cuando tu pañuelo,
dejaste en mi cama,
ni si quiera el saber,
si tal vez,
era verdad,
que me abandonabas.

No se si tal vez,
ese te quiero,
fue mas sincero,
con la copa de vino,
o si tal vez,
era verdad,
que te aturdía en las mañanas.


Como es un vivir, sin tu pelo,
paseándose por mi cama,
como una noche,
en la soledad, sin ti,
ni tan si quiera la foto,
que me alumbraba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario