lunes, 26 de agosto de 2013

Jean Ryan - Juego con el anhelo de tus besos.

Vuelve a ser lunes,
vuelve a ver largas mañanas,
entres cafés infinitos,
de largas madrugadas,
trasnochando,
deslumbrando,
la poesía,
que se pudrían por tu cuerpo,
como si volviera a ser primavera.

Aunque no veas que la noche ya se apaga, veo como tus ojos le faltan la miel, que le faltan las ganas,
de quedarse de comerme los labios con rabia. Quiero volver a volver a recordar, como tu aliento era de sabor a flores, de cuando se lo comían, los bocados de mis trastesas,
de tantos fuegos, de tantos cigarros, en el arrastre de los neumáticos por carreteras en los cantos de los pájaros al alba, en los recuerdos de los finales de verano.

Otra ve entre barrotes de aceros,
que me privan de la libertad,
de tus besos,
de los cuales,
me juego en un anhelo.

Cuando me visitas todas las noches,
todavía se que el aire,
que te trae hacia mi,
lo hace con remordimiento,
de que nos vemos,
que nos abrazamos,
nos besamos,
incluso,
cuando nos reconciliamos,
acabamos follando.


viernes, 16 de agosto de 2013

Jean Ryan - Desencuentros con la luna

Afilamos nuestras almas,
que se bañan,
de lagrimas,
cada mañana,
que ves,
que no duermo contigo.

Que mis sabanas te anhelan,
tu olor,
y todavía,
recuerdan,
cuando tu, no estabas.

Solitaria,
por las calles sin abrigo.

Despacito, tejer tu alma,
la cual me habla,
me dice,
que estas sola,
añorando,
mis besos,
y nuestras miradas al alba.

Que cuando se chocan,
nuestros ojos en la oscuridad,
yo tengo mas ganas,
de arañar mis navajas,
en tu cuerpo,
que te follare,
mañana,
pasado,
hasta que se mueran mis sentidos.

Que este interior de mis papeles,
este bonito silencio,
donde mueren las palabras,
de tantos olvidos.

Este viernes, me visito la locura,
en una mañana,
de pocos amigos,
donde se morían,
las horas,
de sonrisas,
que cuando ves que me desnudo,
para agarrarme,
a ti, poquito,
con mis dedos,
entre tus labios,
de morirte de ganas,
de saber que ya es mañana.

Tantos desencuentros contigo,
que tengo tantos celos de ti,
que espero que no me visites,
mas noche,
sin pedir permiso,
por mi ventana.

jueves, 15 de agosto de 2013

Jean Ryan - Balada del atardecer...

Tus besos, son como lamentos,
de llantos de romances,
de tantos de aguas de hielo,
como si me quedara oliendo,
de nuevo, tu asqueroso cuerpo.

Y me enredo con cada tropezón,
de cada puto verso,
de tantas historias pasadas,
que no solo el sabor del vino,
es añejo,
ni áspero,
ni rojo como tus labios,
cuando me envasan todos los días,
sin pararme a comerme tu pelo.

Si tu eres una copa repleta,
yo seré el que te bebo.

Mi sabanas están llenas de ganas,
y tu que a mi me miras,
me mimas,
me cuentas,
que cuando cuenta los días,
se te erizan,
los últimos pelos,
que tienes ganas de todo,
de absolverme el alma.

Mi soledad se pone a llorar,
que te resisten,tus horas,
abrigándote el higo.

Que yo seré el que camino,
el que busca tu piel,
y cuando esta frente,
me arrodillo.

Que mi libertad, no dependen den leyes,
solo de si estas tu conmigo.




miércoles, 14 de agosto de 2013

Jean Ryan - Londres, 10 de abril

Todas estas noches, que no estas conmigo, son mares, y océanos de lagrimas y tinta,
que se empapan en mis viejos papeles, explicando como me sentí, cuando poco a poco dejaba de olvidar todos tus besos, las noches con las lunas, las cenas infinitas, el sabor de lambrusco en nuestros labios, y nuestro pedazo de postre que se endulzaba en mi colchón.

Y es que cada recuerdo,
son como pestañeos,
infinitos, anhelando,
tu cuerpo,
desnudo,
bajo mis brazos.

Y llegue a centrarme tanto en el pasado, que el presente no tiene frenos, bajo la ria, bajan, historias, y llantos, tristezas y a veces hasta me defraudo, como la ira cuando me visita, es mas peligrosa,
que tu cuerpo, bajo el sol del amanecer, solitario, en este melancólico cuarto


Son muchas las noches sin ti,
tantos minutos,
tantas horas,
cada sueño,
desvelado,
cuantos días,
cuantos meses,
cuantas, cuantos,
y todavía,
aquí frente,
al whisky,
y nubarrones de tabaco.

martes, 13 de agosto de 2013

Jean Ryan - Balada: olvidando el olvido....

Tengo mil de pestañeo,
que me anuncia mi sueño,
este largo invierno,
que hacen falta muchos vasos,
ginebras y hielos,
que me faltan los ceniceros,
porque desde que la luna,
no veo,
de mi sudores me empalago.

Tanto ligar mis araña-duras del corazón,
me estas causando tanto ,
que yo mismo me engaño,
me ensucio,
y en tus recuerdos me baño.

Eres mas fastidiosa,
que te ultimo trago,
que sabe a versos,
con rima,
de los cuales me atrapo,
me llevan a cárceles,
de iras,
de golpetazos.

Y llenar tus baúles de recuerdos,
de papeles,
de firmas,
de prometernos,
que pasaremos,
juntos mas inviernos.

Y tantas noches sin poder dormir,
escuchando mis profundas caladas,
que se perdían entre tanto tiempo
y saber que mañana,
el sol volverá,
a anhelar nuestro amanecer,
y que nos comíamos,
gramo a gramo,
sin un descuido,
sin olvidar,
que tus labios,
se desmallan,
por mi cuerpo.

lunes, 12 de agosto de 2013

Jean Ryan - No, soy yo...

Soy como tus palabras,
al revés de ti,
soy lo que tu no eres,
y cuando quiero,
si quiero interrumpo,
como un huracán,
para colarme,
entre tus piernas,
como el caza tus sueños,
sin ser cazador.

Estos papeles de un viejo cajón
donde se endurece,
 toda mi pereza,
de tantos adiós,
sin corazón,
sin la sombra de mis huevos,
sin el ultimo pestañeo,
sin la ultima flor.


Mi amor se refugia,
bajo la sombra de un pinar,
tumbado,
entre humos,
que nublan,
mis pensamientos,
entre anfetaminas,
que me quitan el sueño,
entre cristales,
que derraman,
mis lagrimas en sangre,
de tanto llegar a pensar,
mi mente se cansó,
de esperar,
y el sueño de un hombre,
que tanto soñar,
despertó,
para volver,
a volver,
a ser el que vuelve,
a volver, a verte,
sin ni si quiera,
tener tus ojos,
en las pupilas,
del que duerme,
bajo tus brazos,
bajos los mares de abrazos,
bajo tus besos,
y tus pasos,
que suenan,
entre tantas basuras,
se quedo sin aire,
el viento ceso,
de ser el que mamaba las gotas,
del volar,
del ser y de ahogarme,
por no acordarme de respirar.

Ya no queda tu olor,
ya no queda nada,
porque,
me pregunto tanto,
si todo se derrumba,
aquí a mi lado.

lunes, 5 de agosto de 2013

Jean Ryan - Despacito, entre tus piernas...

Cautelosamente, despacito,
poco, muy poco a poco,
entre silenciosamente,
para clavarme,
entre tus brazos,
que me enfundo,
en este invierno,
donde hace frió,
en las noches largas,
de pestañeo infinitos.

Llévame a dormir,
que no me dañen mas mis sueños,
que se me cruza tu clavel,
que ensucia y me vuelve,
a volver loco,
como cada madrugada,
en la que despierto,
solo,
sudando a mares,
que enjuagan mis fastidios,
mis lamentos de noches,
sin ti a solas en la cama,
en las que tan buenos momentos,
tantos polvos,
sin amor,
ni sin adiós.

Eres este abril,
sin tener,
mis mañanas de tus olores,
que se apagaban,
en mi cómoda,
de los recuerdos,
de las fotos,
de las colillas mugrientas,
con tu carmín de tus labios,
que se marcaban,
por todo mi asqueroso cuerpo.

Quédate a mi lado,
que nos resbalen,
todas las horas,
que nos bebamos el amanecer,
tras otros polvos,
sin escuchar al gallo.


Que tus recuerdos,
no son amuletos,
ni sucios trapos,
que se renegaran,
todas las mañanas,
sabiendo que soy muy poco,
un trozo de papel liado,
otro que se quema,
otro que se arruga,
y otro que se fuma.

jueves, 1 de agosto de 2013

Jean Ryan - Dagas, filtrantes...

Estoy paseando,
por la largas noches,
de relojes de regaderas,
que se derraman,
en mi penumbra luna,
de noches en velas.

Cuando mas te decía,
que tu eras mi vida,
yo me iba,
para ver cual de los callejones,
me llevaba a la salida.

Mucho tiempo,
y aun me acuerdo de ti,
y ya no te veo sonreír,
de tantos momentos,
de tantos olvidos,
de tantos polvos,
que se esfumaban,
con el paso de los días,
con el amargo de la derrota,
con el sabor de la melancolía.

He llorado,
mientras sonreía de alegría,
cuando ya deje,
aun lado la ira,
de tantos días,
de tantas cenas,
sin despedidas.

Con muchas yagas,
de cuantos planes,
de decirnos,
siempre dormiremos juntos.

Pero me faltan,
tu riñas y abrazos,
el dolor de tus mentiras,
el saber donde estas,
y tu aya me decías.

Eres como este tango,
que se va muriendo,
sin estar a menos,
de unos putos centímetros,
eres esta vela,
que se apaga,
en mis oscura habitación.

Me he visto entre miles de colillas,
llantos bajo la lluvia,
entre la embriaguez de la ginebra,
de los cortes de dagas,
que dañaban,
lentamente mi corazón.

Cubierto de papeles,
de ojos sangrados,
de tus vacío.